Wednesday, May 23, 2007

QUE EL DIOS ABANDONABA A ANTONIO


Cuando de repente, a medianoche, se escuche
pasar una comparsa invisible
con músicas maravillosa, con vocerío -
tu suerte que ya declina, tus obras
que fracasaron, los planes de tu vida
que resultaron todos ilusiones, no llores inútilmente.
Cómo preparado desde tiempo atrás, como valiente,
dile adiós a Alejandría que se aleja.
Sobre todo no te engañes, no digas que fue
un sueño, que se engañó tu oído:
no aceptes tales vanas esperanzas.
Como preparado desde tiempo atrás, como valiente,
como te corresponde a ti que de tal ciudad fuiste digno,
acércate resueltamente a la ventana,
y escucha con emoción, más no
con los ruegos y lamentos de los cobardes,
como último placer los sones,
los maravillosos instrumentos del cortejo misterioso,
y dile adiós, a la Alejandría que pierdes.
Constantino Kavafis
(1.863-1.933)

5 comments:

nadie said...

A mi me da en el centro del corazón, seguramente el más feroz de todos: La ciudad.
saludos,

Cpunto said...

es lindo eso, imaginar a la ciudad que se va y uno se queda, es triste eso, decir adiós y aún tratar de sonreir,

MeRiAdOx said...

No conocía a este poeta... gracias por el aporte a mi biblioteca personal...

Jeza said...

Me hizo sentir en Uruguay, con la comparsa y el candombe, con el carnaval de febrero y con la alegría al por mayor.
Muy bonita, la poesía.
Salú!

Anonymous said...

que wena (que es mas alla que buena creo yo, que wena que recuerdes estos textos tan maravillosos llenos de magia, llenos, de mierda, llenos de esperanzas, llenos de lo mismo